El Hygge es un estilo de decoración que nos llega desde Dinamarca, donde la felicidad y la calma son factores imprescindibles para llevar un buen estilo de vida. El Hygge busca el equilibrio y la serenidad a través de la decoración y mobiliario del hogar para lograr el máximo confort de los habitantes.
La palabra Hygge es un término noruego que representa el pleno bienestar. Aunque es un estilo de decoración atemporal, aplicable tanto en invierno como en verano, se aprecia su origen nórdico en los tonos mayoritariamente fríos que lo envuelven.
Si queremos trasladar el Hygge a nuestro hogar, debemos tener en cuenta que lo primero son las personas y su bienestar. Todos los elementos de la casa tienen que ayudar a alejar el estrés de la vida diaria.
Por eso, los ambiente puros y sencillos son una prioridad en este estilo. Hay que lograr espacios con poca ornamentación, bien ordenados y con libertad de circulación de sus habitantes.
Los amplios ventanales que permitan entrar el máximo de luz natural, junto a colores claros y ligeros, deben crear una armonía general que transmitan serenidad. El color blanco para rellenar y los colores tierra para acabar de definir los espacios son la mejor combinación para conseguir el Hygge.
Las velas y las texturas en mantas, cojines y alfombras aportarán ese toque cálido necesario para que tu hogar se convierta en un espacio 100% acogedor.
El Hygge va más allá de ser un simple estilo de decoración y puede entenderse como una filosofía de vida, por lo que si quieres lograr este estilo de decoración, tendrás que empezar a cuidar al máximo todos los detalles de tu hogar. ¿Estas preparado para vivir la vida al estilo Hygge?
