Por eso, hoy os traemos unos cuantos consejos para convertiros (casi, casi) en expertos en pintura y bricolaje :)
Antes de empezar a aplicar primera capa de pintura, no debemos olvidar:
- Tener las ventanas abiertas. Puede parecer obvio, pero imprescindible. Por dos motivos: la pintura secará más rápido y evitaremos una saturación de olores.
- Iluminar la zona, preferiblemente con luz exterior, aunque también nos serviría la luz artificial. Así podremos ver perfectamente los fallos y corregir a tiempo.
- Cubre los interruptores con cinta de carrocero y remata las esquinas.
- Cubre el suelo con un plástico de pintor, o una manta vieja.
- Asegúrate que la pared está bien preparada. Lija la pintura anterior para que la nueva se adhiera correctamente.
A la hora de pintar:
- Mantén el techo blanco para simular más altura en el cuarto, o píntalo de un color más oscuro para dar una sensación más acogedora.
- Utiliza acabados brillantes sólo en baños y cocinas y evita los excesos.
- Para disimular defectos en tus paredes, usa efectos texturados. El gotelé es el más conocido (y controvertido), pero existen otras técnicas como el trapeado (pintar con un trapo) o el esponjado (pintar con una esponja).
- Si buscas disimular el gotelé puedes optar por pinturas blancas muy mates.
- Si vas a apostar por combinar colores, es aconsejable que la pared más oscura sea la que menos luz recibe. También puedes usar diferentes colores para diferenciar ambientes.
Y hasta aquí nuestros trucos, ¡no olvidéis que lo más importante es tomárselo con calma!
¿Conocíais estos trucos? ¿Hay alguno que creéis que falta en nuestra lista?