Con el paso de los años y el uso, los muebles y accesorios de la cocina se desgastan y deterioran. Hoy, te traemos un DIY perfecto para que tu nevera luzca como nueva y la utilices de forma totalmente novedosa: ¡convertiremos su superficie en una pizarra! De esta forma, conseguiremos un proyecto 2 en 1: rejuvenecerla y, además, darle un nuevo uso.
Para empezar tienes que asegurarte de que la superficie de la nevera está limpia, utiliza un paño seco y un poco de quitagrasas o amoníaco para retirar cualquier tipo de suciedad que pueda existir.
A continuación utiliza nuestra Preparación Multiuso TITAN para que la pintura de pizarra se pueda adherir correctamente. Aplica una capa del producto por toda la superficie y los tiradores de las puertas y en 30 minutos estará seco.
¡Ahora toca darle color a la pizarra! Dispones de dos colores de nuestra TITAN Especial Pizarras, el verde y el negro. El verde puede resultar atractivo si tu cocina es muy colorida y combina bien con el resto de elementos y paredes. El negro es la alternativa para aquellas cocinas menos coloridas, es un color neutro con el que siempre se acierta y además tiene un toque de elegancia y modernidad.
Primero cubre con cinta de carrocero los tiradores, remueve bien el envase y aplica la pintura por toda la superficie de la nevera con bocha o rodillo. El secado tarda un mínimo de 2 o 3 días antes de poder utilizar la pizarra, así que puedes aprovechar para retirar la cinta de carrocero de los tiradores y pintarlos con un color de nuestra gama TITAN Unilak Mate que complemente o que contraste con el verde o negro.
Una vez esté todo bien seco, estarás listo para empezar a escribir con tiza en tu nueva y rejuvenecida nevera. A partir de ahora podrás apuntar la lista de la compra, hacer un recordatorio a tus hijos o desear unos buenos días. ¿Qué será lo próximo que tú escribas en la nevera?
